Tercera y última observación de Elena de la Puente Nicolás a Marina Álvarez Álvarez.
Después de intercambiar nuestras experiencias docentes, tanto Marina como yo estamos de acuerdo que aprender un nuevo idioma a través de juegos, ya sean digitales, comunicativos o manipulativos, ayuda a que el aprendizaje sea mucho más significativo.
Después de observar a Marina, puedo afirmar que me ha ayudado a mejorar mi práctica docente y he podido trasladar a mi aula algunas de las herramientas que utiliza. Las que más prefirieron los alumnos fueron “Baamboozle” ya que permite el juego por equipos, fomenta el speaking y es muy divertido para ellos; “wordwall” ya que es muy rápido de crear, los juegos son atractivos y hay diferentes tipos de actividades; el “quizziz” para comprobar el vocabulario, permite tener preguntas con audio y es muy sencillo de utilizar.
Otra idea fantástica ha sido realizar el kahoot al inicio y al final de la misma unidad. A los niños les encanta y es una muy buena forma para que vayan siendo conscientes de sus aprendizajes.
Compartir la experiencia con mi compañera Marina ha sido muy enriquecedor, pero también lo ha sido poder leer a todos los participantes del proyecto porque siempre se aprenden nuevos recursos y diferentes experiencias educativas.
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